Trabaje mucho, tanto, que sin darse cuenta cumpla varios meses sin descansar un fin de semana completo, luego, cuando esté muy agotado, tome aquello que se le hace intolerable en un ser humano, y búsquese el espécimen que más alto contenido del defecto en cuestión tenga, no importa lo que tenga que hacer, encuéntrelo, finalmente expóngase a él todo el tiempo que sea posible.
Digamos, por poner algún ejemplo, que usted encuentra intolerable que la gente no tenga orejas, en ese caso, en lugar de irse a descansar a su casa el primer fin de semana que tiene libre en meses, cómprese un tiquete a París; hágase el ingenuo, dígase que va a pasear, que el costo no tiene importancia si por fin va a tener unos cuantos días para usted, ¡y nada menos que en París! Cuando llegue allá, hágale caso al turista de al lado que está diciendo que el museo D’ Orsay es mejor que el Louvre, más pequeño, más cómodo e igual de sustancioso; cómprese una boleta y anímese bastante (a pesar del cansancio de tantas horas de vuelo, tan pocas de sueño, tanto por hacer y tan poco tiempo para hacerlo) viendo aquella antigua estación hecha museo, con sus esculturas griegas y romanas en el primer piso, y una coronación de Napoleón con un Napoleón casi de tamaño natural en el segundo, cansado pero contento vaya al tercer piso, allí se encontrará con los impresionistas, y en el momento justo en que con justicia usted vea llegar por fin la fascinación por la que estaba buscando, encuéntrese con el retrato de Van Gogh, ese, el que precisamente no tiene oreja, ¡pero si se supone que ese retrato no debería estar ahí sino en Ámsterdam!, pues no, el destino le ha jugado una malísima pasada y el Van Ghog sin oreja está ahí.
SECRETOS Y MENTIRAS
Di, qué será de ti, qué será de mi,
Cuando estalle al fin,
esta relación,
tu me dirás que no,
nada sucedió,
"Apagad la luz,
guardad toda aquella ropa en un baúl
y arrojad la llave".
Querías un regalo
Y yo derramé encantado
con un grito entre tus tetas
aquel collar de perlas
y en ese instante el mundo terminó
y él apareció a plena luz del sol
nadie rechistó,
así que me acerqué,
le dije entonces ¿qué?
él dijo ¿qué de qué?
y yo "apagad la luz
guardad toda aquella ropa en un baúl
y arrojad la llave".
Hace mucho tiempo
que ya hace mucho tiempo
de cualquier cosa en mi vida,
mi vida malherida,
alejaos que ahora envejezco.
Gente nace y gente muere cada día,
los demás nos limitamos a estorbar
y jugamos a secretos y mentiras
y despues nos lamentamos
Que viva el ser humano,
la gente grita !hey, hey...¡
"Bien" dice entonces él
"veo que tienes sed
yo te la apagaré
a base de chas, chas, chas"
pero llega alguien más
Y le oigo balbucear
"Apagad la luz,
guardad toda aquella ropa en un baúl
y arrojad la llave".
Por allí huyen unos,
por allá los otros,
¿Quién entre ellos, por lo tanto,
se está equivocando?
Decídmelo que estallo...
Gente nace y gente muere cada día,
los demás nos limitamos a estorbar
y jugamos a secretos y mentiras
y despues nos lamentamos
Que viva el ser humano,
la gente grita !hey, hey...¡
Gente nace y gente muere cada día,
los demás nos limitamos a estorbar
y jugamos a secretos y mentiras,
"Por favor defíname la eternidad"
Gente nace y gente muere cada día,
los demás nos limitamos a estorbar
y jugamos a secretos y mentiras,
como el niño cruel que acecha,
como aquel gran atleta
drogado en la carrera
nueve segundos restan
la guerra empieza...
"¡hey...!"
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